lunes, 19 de diciembre de 2011

Cosas de Niños II.-

Hace un par de semanas escribí un post bajo este mismo título. Varias personas me han ido comentando que volviera a escribir sobre el mismo tema, es más que lo convirtiera en un apartado propio de Cuando Olía a Vainilla. Antes de que me lo comentaran reconozco haberlo pensado y hoy por fin escribo el segundo post de "Cosas de Niños". Aún no sé si lo dejaré en un post semanal o quincenal o tal vez deje un apartado en mi facebook donde se puedan dejar anécdotas y luego pasarlas al blog. Ya me contarán qué les parece la idea.

La primera anécdota de hoy la viví en primera persona, pero no era yo la niña, les cuento. Recién acabada la carrera estuve trabajando de profe sustituta en el cole donde había estudiado de peque. La profe de inglés estaba embarazada y por problemas en el embarazo le tocó hacer reposo así que allí estaba yo a dos meses de final de curso haciéndome cargo de los enanos. Según entro en la clase de tercero, hablo de primaria, me dice su tutora " a éste, aquella, aquel y aquel otro nos los tengas nunca juntos, por separados los controlas juntos no". Tome nota de la recomendación y me quedé a solas con los 25, para ir conociéndolos les pedí que cada uno me fuera diciendo su nombre " My name is..." o " I'm...".




Los niños comenzaron contentos con las presentaciones pero de pronto escucho "señoooooooooo....señoooo....fulanito me ha dicho que tengo cara de preservativo". Era la niña de la tercera fila quien hablaba, me quedé mirándola atónita mientras pensaba "¿qué demonios es tener cara de preservativo?". Aún hoy sigo sin saber qué demonios es tener cara de preservativo pero preferí vivir en la ignorancia y hacer oídos sordos, me daba miedo escuchar un "no eres mayorcita para saberlo".




Siempre he pensado que como la comida de mi madre no hay ninguna pero eso mismo lo pensamos todos, ¿ o no? Yo nunca diría que las croquetas de la cocinera son como las de mi madre, ya quisieran los de la cocinera y pobres los del anuncio que las croquetas de sus madres son como las congeladas. Sin embargo, el niño de esta historia,vecino mío de peque venía cada día en busca de la comida de mi madre a la salida del cole porque decía que la comida de mi madre estaba mucho más buena que la de la suya, sin embargo, lo que él no sabía es que cada día antes de llegar del cole su madre le dejaba a mi madre un tupper con la comida para el hijo, jejeje, el mismo tupper que él se llevaba y se comía encantado mientras le decía a su madre " ves mami la sopa de la madre de Elva está muy rica".


Estando en las fechas que estamos no podíamos dejar de contar una anécdota a cuenta de los Reyes Magos. El pasado fin de semana el niño de unos amigos tuvo una merienda en la cual recibieron la visita sorpresa del rey Melchor, el cual estuvo preguntando que querían este año, cuando llega su turno el pitufillo le dice " es que mi rey es Baltasar", a lo que Melchor le responde "no te preocupes, yo lo voy a ver y le contaré lo que tú me digas". "Perdóname Melchor pero no me fío, prefiero decírselo yo cuando lo vea".¿Imaginan la cara de estupor de Melchor?je je je je....



1 comentario:

  1. Elva esas historias son para reirse, yo me quedo con la del vecino que va a almorzar la comida de su madre con la tuya, jajajaja.
    Saludos.

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