El domingo pasado fuimos a dar un paseo a la feria del libro que han puesto en la Gran Vía. Mi Piojillo se portó de fábula, como siempre, todo hay que decirlo en casa es un locuelo pero cuando salimos se porta muy bien. Estuvo todo el rato sentado en el carrito mientras su papi y yo cotilleábamos los libros.
Él iba a su rollo. Con sus cantaletas. Ahora no para con sus letanías y va soltando unos rollos increíbles, a saber qué dice, quizás sea mejor no saberlo. El caso es que iba muy tranquilo durante todo el paseo.
Cuando ya nos íbamos empezaba a estar cansado de ir tanto rato sentado y pensé en darle un poco de libertad, con todo lo que ello significa. Ir corriendo detrás de él a todas partes. De camino al coche iba él tan feliz correteando por las aceras, parándose en cada escaparate, en cada portal pero desde que le decías "Adiós...adiós.." se venía corriendo a nuestro lado.
De pronto, llegamos a un escaparate y mi niño se queda parado.Afianza las piernas en el suelo. Se agarra con fuerza de la reja y empieza " Motooooooooooooooooo....motooooooooooooooo...motoooooo... mameeeeee.....mameeeeeeeeeeee....".
¡¡¡No...no..no nos moveran!!! |
Era ni más ni menos que el escaparate de la Harley Davidson y no, no había forma de arrancarlo del sitio. Gritaba como un poseso "mameeeeeeeeeee.... motooooo....".Mi niño se quedó prendado de una motito de 18.000€, jejeje, a ver que lo entiendo que yo paso de motos y he de reconocer que es muy bonita.
Ahora lo único que espero es que en su carta a los Reyes no ponga "Queridos Reyes Magos quiero una Harley...." porque tanta magia no hace ni los reyes, ni santa ni la tarjeta de crédito.
Hay cosas que solo las explica la genética y el género... busca e por ahí, seguro que en la familia hubo un motoquero, jiji.
ResponderEliminarSaludos.
Jajajaja, sí, al papi le encantan las motos,por él, también pediría la harley a los reyes magos o a santa claus,jajajaja.
ResponderEliminar