Para la señora alcaldesa de mi pueblo no existo, no existo en el sentido de no vivir aquí porque en el de René Descartés tengo claro que sí, jejeje, esto me recuerda lo que le contesté una vez a un policía cuando osó decirme que NO EXISTÍA porque ellos no encontraban mi documentación al ir a renovar el DNI.
Tal debía ser mi cara que me dijo " no es que no existas sino que no encontramos tu ficha, se traspapelaría en la mudanza", "ya suponía" le dije "porque pensar le juro que pienso".
El poli no debía conocer a Descartes y su Cogito Ergo Sum porque su cara mostraba la incomprensión ante mi comentario.
Bueno, éste no es el tema, sino que para mi alcaldesa no existo, al menos no postalmente hablando. Envía cartas a casa dando la bienvenida como nuevos ciudadanos a mi marido e hijo, para aquellos que no lo sepan tiene 13 meses,y a mí ni mencionarme.¿Qué pasa conmigo? ¿Acaso no soy bienvenida aquí?
No, no queda la cosa ahí. Hace unos días llega otra cartita, invitándoles a ambos a participar en las fiestas patronales. ¿Y yo? ¿Soy acaso la nueva Cenicienta a la que no invitamos al baile? Miento, a Cenicienta sí que la invitaron, la madrasta no la dejaba ir. ¿No soy bien recibida en sus fiestas?
Para mí que ésta me conoce, que sabe que conmigo no tiene nada que hacer, que por mucho árbol, parque, etc que tenga en los alrededores de casa a mí sólo me gusta escuchar las gaviotas en la playa !!!
Pues yo cambiaría mis vistas al mar, con gaviotas incluidas, por "no" recibir cartas de Gallardón...jejeje ;o) Besitos Campanilla.
ResponderEliminarJajajaja, te entiendo!
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