miércoles, 15 de junio de 2011

Resulta que...

    Resulta que hubo un tiempo en el que mis compañeros de clase  y yo al escuchar el tintineo de unas llaves colgadas de un llavero de Camel nos atemorizábamos, las niñas nos abrochábamos el babi,los niños se colocaban los polos, y todos nos quedábamos rectos y callados en nuestras clases.


    Resulta que hubo un tiempo en el que esperaba nerviosa que el profesor de mates, el que llevaba las tintineantes llaves, me sacara a la pizarra a resolver algún problema.








   Resulta que hubo un tiempo en el que en clase de dibujo no le podías pedir el afilador (sacapuntas para los no insulares) a tu compañero porque la profe se ponía de los nervios y llamaba a su señor esposo, el tintineador de llaves.


   














Resulta que vivíamos un tanto asustados en clase pero hoy lo recuerdo hasta con cariño porque aprendí todo lo que tenía que aprender y más, entre otras cosas a no utilizar el miedo y la opresión para enseñar a mis alumnos, cuando los he tenido, y fíjate por donde que nunca me hizo falta gritar, amenazar,etc etc...






  Resulta que con el paso de los años ya no estoy en séptimo u octavo, los actuales 1º y 2º de ESO, ya no llevo babi ni estudio mates o dibujo, ya no escucho el tintineo de las llaves pero escucho los ladridos, que me perdonen los perros, de un prepotente que se cree más por gritar, insultar, pisotearte tus derechos, y el corazón se me acelera como en clase de mates. Salvo que al profe de  mates lo respeto a este tipejo no.


  Resulta que con 12 ó 13 años callas y otorgas, por lo menos , en mi generación, ahora lo pongo en duda. A los 40 no. Resulta que vuelves contenta de tu reciente maternidad y te dicen  al pedir tu derecho a lactancia "¿sabes cuántas mujeres han sido despedidas este año  de crisis?


  Resulta que no, no me callo, quiero mis derechos y los de mi hijo a tener la reducción por lactancia materna, te pisotean te avasallan, intentan ningunearte, hacerte sentir que no eres nada ni nadie y tú sigues ahí haciendo tu trabajo y el que no es tuyo.   Resulta que ya no lloras delante del tirano pero a la larga explotas en silencio.



  Resulta que ahora después de todo veo el lado positivo y doy las gracias, gracias a la imbecilidad humana, por considerarlo humano, te permiten disfrutar de tu hijo.


  Resulta que he escuchado su primer PAPÁ, su primer MAMÁ, lo he visto sentarse, gatear y ahora caminar.




  Resulta que yo tengo vida, familia y amigos fuera de esas cuatro paredes, si mis chistes son buenos la gente se ríe, si son malos nos reímos todos, otros nunca sabrán lo que es la sinceridad de una sonrisa.


 Resulta que al final me da pena y todo...


7 comentarios:

  1. Un abrazo desde acá. Yo se lo que es tener que soportar un jefe prepotente, irrespetuoso y avasallador. Por fortuna a penas nació mi hija pude dejar el trabajo y no tener que aguantarlo más.

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  2. Yo no lo dejé. Terminé con una baja por ansiedad, me dio una crisis bastante fuerte. Y tras unos cuantos meses de baja me pusieron de patitas en la calle con otra excusa.
    Lo bueno de todo es que estoy disfrutando de mi niño.
    Espero que dentro de poco esto sólo sean historias del pasado y ya no tengamos con luchar por la conciliación.
    Un abrazo

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  3. Muchísimas gracias por contarnos tu historia, es un claro ejemplo de no respetarte por parte de tu empresa... Me alegro mucho de que estés bien y contenta de la decisión. Un besito

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  4. No es que esté contenta por haber sido despedida.Hubiese preferido seguir trabajando.Pero, le he dado la vuelta a la tortilla y visto el lado positivo, la botella siempre medio llena. Con el horario de trabajo sólo disfrutaría de mi hijo los fines de semana, entre semana sería baño, cena y a dormir. Ahora va a la guarde y toda la tarde la tenemos para nosotros. Un abrazo.

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  5. De verdad que no entiendo como pueden vivir con la tranquilidad de sermonearte sobre las mujeres que han sido despedidas por la crisis cuando tu reclamas tus derechos...
    Como tu dices, como mínimo hay que buscarle el lado positivo a esta situación y es que puedes disfrutar estos ratitos con tu hijo.
    Un saludo

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  6. a veces lo malo se convierte en bueno!! has podido disfrutar de tu hijo y eso es maravilloso!!! a pesar de que has tenido que soportar lo tuyo.... gracias por compartir tu experiencia!!

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  7. Gracias a todos y sí siempre hay que ver la botella medio llena, en este caso he podido disfrutar de mi piojillo, le he enseñado a caminar, lo he visto levantarse y caerse, aprender a hablar.
    Un abrazo

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¡¡¡El Comando piojo te da las gracias por tus comentarios!!!