El pequeño Chef |
Sin embargo, a lo largo del fin de semana ha dejado sus herramientas y su afán por ir dando martillazos por toda la casa en algunos momentos determinados. Uno de ellos fue cuando me pilló en la cocina preparando madalenas de manzana y chocolate.
Al pillarme con las manos en la masa dijo
" mamá, tarta"
acercó una silla hacia donde estaba yo trabajando y se puso a remover la mezcla, de vez en cuando probaba la masa y volvía a meter la cuchara en la mezcla, je je je je, igual por eso estaban tan buenas las madalenas, je je je je je.
Supongo que todos lo niños sienten pasión por los cacharros de la cocina. El piojo entra y rebusca por los muebles y cajones, los que puede abrir, porque parte del mobiliario está blindado. No queremos llevarnos un susto porque coja cuchillos, bandejas de cristal o productos tóxicos.
Bien, al piojo no sólo le gusta sacar calderos, sartenes, espumaderas, batidores.... A él le gusta ponerse manos a la obra y en más de una ocasión le he permitido remover mezclas de bizcochos, tartas, madalenas. Al igual que si nos ve limpiando lo dejo que pille el plumero y vaya barriendo, es para lo que lo utiliza. También le gusta darle el bibe a los bebés, aunque luego coja al supuesto bebé y lo lance por los aires. Pero, lo importante es que juega a todo tipo de juegos, de los que antiguamente se llamaban de niños y de niñas.
Al fin y al cabo, los hombres tienen que comer, han de saber recogerse la casa y si un día son papás han de saber como darles de comer.
¿A tu hijo también le gustan estos juegos?
Si, a mi hijo le encantan.
ResponderEliminarPrecisamente te iba a decir en la entrada del martillo, que herramientas y cacerolas suelen ser los juguetes preferidos de muchos peques.
Pues a dejarle que ayude, que muchas veces pensando en los estropicios o que van a manchar mucho no les dejamos y luego cuando de mayores ya no quieren, nos toca arrepentirnos.
Saludos
Sí, espero que comenzando como un juego luego lo coja como un hábito, como lo de recoger!!!
EliminarBEsitos
Me encantan esos momentos en la cocina, a mí me revuelven siemrpe el cajó donde están las espátulas y batidores, jaja.
ResponderEliminarMe encanta como se ve tu piojillo.
Saludos.
Lo de tener los cajones ordenados con estos bichos es casi misión imposible, cada día me toca ordenarlos!!
Eliminarbesitos
jajaja, qué lindísima foto! No sabría a quién comerme antes, si las magdalenas o a tu piojo...
ResponderEliminarPersonalmente me gusta más el término educar en equivalencia que en igualdad, jejeje, porque considero que los niños y las niñas no son iguales, como no lo somos los hombres y las mujeres. Bufff, pero quita, quita, que aquí lo importante es esa preciosidad de chef o pinche... Estupendo el dejarles implicarse en nuestras tareas y hacerlos partícipes de ellas, porque se refuerza la confianza que ven que depositamos en ellos.
Un besote guapa!
Las magdalenas estaban muy ricas, el piojo no sé yo si no te seguirá pegando patadas una vez te lo comas,ja ja ja ja, y tú ya llevas un bichito de los que dan pataditas,¿ o no?
EliminarBesitos
A mi hijo le encanta ayudar y colaborar en todo. A ver si un día le saco una foto ayudándome a tender, le encanta ir dándome las trabas jajaja. En la cocina aún no ha tenido la ocasión de hacer sus postres, me da un poco de miedo por una muy mala experiencia que tuvo una amiga, pero todo se andará. Un besote para ese cocinero tan guapo! ;)
ResponderEliminarUff,lo de las trabas les supera!!!Éste como las pille tiene entretenimiento para rato!!
Eliminarbesitos
jaja me encanta la foto Elva!! sale guapísimo!
ResponderEliminarYo también dejo que mi hijo juegue a los llamados juegos de niña, como tú me gusta educar en la igualdad, y es que nada de malo tiene que un niño juegue con muñecas. Mi peque es muy de jugar con las cosas de su hermana y en casa salvo mi abuelo que debido a su edad no consigue entender el por qué lo permito, nadie le dice nada, todo lo contrario, jugamos con él. Besos!
Jajajaja! Me parto! Es genial!!
ResponderEliminarMi hijo también me quiere ayudar cuando me ve en la cocina, pero nunca le he visto tan atento y entregado como a tu Piojillo ;-)
Me parece genial. Es fundamental educar en la igualdad, a fin de disminuir la brecha cultural de género!!!
ResponderEliminarYo de momento, le tengo prohibido ingresar a la cocina sin mi supervisión... de momento su obsesión son las cucharas :) ... yo creo que se debe a que está aprendiendo a comer solita!!
Bezasos!
¡Me ha encantado el título!
ResponderEliminarSoy nueva en esto, ¿quieres ver mi blog?
www.elverboregalar.blogspot.com
Aún recuerdo a un vecino mío que no dejaba que su hijo cogiera mis muñecas porque decía que eso es de niñas. Me alegra que tu peque sea capaz de adaptarse a todo, cuando puedas mándamelo para que me enseñe a hacer esas magdalenas tan ricas! jajaja. Besotes
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